Las lesiones de acné, cuando se resuelven, tienden a producir una destrucción de determinadas capas de la piel, dando lugar a las características y en ocasiones terribles cicatrices. La inflamación que acompaña al proceso también ocasiona la presencia de manchas y pigmentaciones que empeoran aún más el cuadro. Los principales tratamientos que utilizamos para corregir estas secuelas son:
- Láseres Fraccionales: este tipo de tecnología consigue remodelar la superficie de la piel a través del microfraccionamiento del haz de luz que emite el láser en múltiples micropuntos. Estas “microfracciones” de láser penetran hasta la capa media de la piel, estimulando la formación de colágeno y otras estructuras que mejoran la textura y calidad de la piel tratada. Este tipo de tratamientos actúan sobre todas las secuelas derivadas del acné, tanto cicatrices como las pigmentaciones.
- Peelings: La eliminación de las capas superficiales de la piel mediante la aplicación de una serie de sustancias tópicas consigue mejorar el aspecto de la piel que ha sufrido de acné. Los diferentes tipos de peeling se seleccionan en función de la piel del paciente y de lo que se desea corregir.
¿Cuál es el momento ideal para tratar las secuelas producidas por el acné?
Siempre aconsejamos a nuestros pacientes que es conveniente controlar primero el acné. En muchas ocasiones nos llegan pacientes que han realizado distintos tratamientos para mejorar las cicatrices de acné sin experimentar mejoría y lo primero que observamos es que siguen presentando un acné activo. Cualquier intento de corregir las secuelas sin antes eliminar el acné es inútil.
Una vez tenemos una piel estable, sin aparición de nuevas lesiones, podemos plantear cualquiera de los protocolos que utilizamos para tratar las secuelas. Los primeros momentos en los que las cicatrices son más incipientes y existen pigmentaciones son ideales para iniciar los tratamientos. Estos, conseguirán mejores resultados cosméticos sobre las señales, además de evitar la aparición de nuevos brotes de acné. No obstante, cicatrices antiguas pueden también beneficiarse de cualquiera de los tratamientos que empleamos.
¿Qué podemos esperar de los tratamientos de las secuelas del acné?
En primer lugar, debemos individualizar cada paciente. Existen multitud de tipos de pieles, acnés previos y secuelas. Siempre valoramos previamente cada caso antes de iniciar cualquier tratamiento. En esta consulta examinamos la piel y recomendamos el tratamiento más adecuado para cada persona. Esta visita es importante ya que también intentamos explicar los cambios que conseguiremos sobre esa piel dañada.
Con los distintos tratamientos pretendemos mejorar la textura, tamaño del poro y condiciones deficitarias de una piel que ha sufrido de repetidos episodios de acné, al igual que atenuar el color, profundidad y bordes de las cicatrices existentes.
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